¿Encontró el FMLN una solución real en la candidatura de Funes?

Ante el anuncio de esta semana de la comisión política del FMLN, referente a la escogitación a dedo de la rara fórmula Mauricio Funes-Sánchez Cerén, que presentaría ese instituto político como su opción en las próximas elecciones presidenciales del 2009, surge una vez más la duda latente: de si el FMLN participa en las elecciones presidenciales específicamente, para ganar o como siempre para perder y así poder seguir disfrutando de la comodidad que da estar en la oposición, disfrutar la mieles del gobierno, pero sin responsabilidad.
Veamos el origen de las dudas:

• ¿Dónde se ubica Funes ideológicamente (No mediáticamente)? Social Cristiano? Comunista? Anarquista? socialista? Renovador? Ortodoxo? Tercerista?
• ¿Quién llevaría las riendas del Gobierno en caso ganara el FMLN?
• ¿Qué criterios pesaron para descartar a Oscar Ortiz?

Funes no tiene bases en las estructuras del FMLN, el grueso de votantes de izquierda apoya la marca no al candidato, la fracción legislativa y las estructuras orgánicas partidarias, donde Funes no existe, responden a Sánchez Cerén, desde la comisión política para abajo, la disciplina partidaria es vertical y no le da oportunidad a un no dirigente de vulnerar la dirección sobre las masas. Sin un apoyo de las bases del partido que lo catapulta, sin el apoyo de una fracción legislativa, si Funes ganara se diera un fenómeno parecido al del gobierno anterior de Nicaragua, el del Dr. Bolaños, una Presidencia débil, sin mando real, mientras Daniel Ortega desde el palacio legislativo junto a Arnoldo Alemán, desde la cárcel, fueron el poder real. Resultado: ingobernalidad y mayor atraso para Nicaragua. En el mejor de los casos Funes aspira a obtener un poder formal sumamente débil sometido a un poder fáctico partidario.
Pero analicemos la base propia de Funes, el grueso de sus votantes con los que Funes se identifica y viceversa:
Funes ha sido el rostro y la voz de ideas ajenas, que después de veinte años de repetirlas públicamente y ante la hoy ausencia física de sus verdaderos dueños pretende presentarlas como suyas.
Es Mauricio Funes un hombre del pueblo, por el pueblo y para el pueblo? o es un hombre solo, elitista, narcisista?
Veamos su trayectoria hasta antes de declararse públicamente como aspirante a Presidente. (Porque hasta en eso es elitista (arrogante): él no se define así mismo como político, el se auto define como candidato a Presidente.
Es una de las caras mas visibles del Jet Set de la burguesía izquierdista, sus congéneres abarcan desde pseudo intelectuales de izquierda, pasando por dirigentes de empresas que viven o se benefician de las cuotas de poder que ha obtenido la izquierda, dirigentes de ONG’s, y extranjeros internacionalistas, además de algunos jóvenes estudiantes influenciables de algunas universidades privadas.
Funes y su grupo más cercano, se ha caracterizado más que por compartir una ideología pura de izquierda, comparte un resentimiento en contra de las estructuras formales de poder de las cuales aunque se siente calificado para ejercerlo resiente su marginación para disfrutarlo.
Funes es elitista y no común o comunista en sus costumbres y hábitos de consumo: viste, usa, calza, fuma y bebe marcas no comunes para quienes dice representar, abusador reconocido y no protector de sus parejas de turno, es conocido por autoritario y déspota con sus colaboradores más cercanos, se distancia para diferenciarse de las costumbres de sus connacionales. En lo que más se parece a un izquierdista de hueso colorado es que está en contra de las estructuras de poder, eso si por motivaciones diferentes ya que lo que Funes detesta no es el poder sino a quienes lo ejercen. Es cuestión de tiempo para que Funes se revele contra las estructuras partidarias del FMLN.
En pocas palabras, Mauricio Funes es alguien que solo quiere utilizar las bases de la izquierda para sus fines personales, ligados muy cerca a la vanidad y la soberbia intelectualoide, la pregunta es se dejará utilizar el FMLN?
La maquinaria electoral del FMLN cederá a Funes el cuerpo que necesita su tan ansiada candidatura, ya que el escaso grupo que se identifican con él no alcanzan ni a sacar más votos que el CD. Para asegurarse que el muchacho Funes no se les salga del huacal, el FMLN ha puesto en la fórmula a uno de sus duros, con la esperanza que este pueda someter al macho sin dueño en el que se han montado. A Sánchez Cerén se le ha dado la misión de guardián de la ideología y del plan FMLN, en caso que ganaran las elecciones, éste deberá ejercer una vez más el triste papel de carcelero de rehenes secuestrados, en este caso sería Funes representando el poder formal al que aspiran.
Por todo lo anterior podemos deducir que Mauricio Funes es sólo un candidato pobre y lo que es peor es un pobre candidato, sólo, débil y sin capacidad real de ofrecerle gobernabilidad al país.